Regulados en Europa por el Reglamento eIDAS, su objetivo es que todos confiemos en la seguridad de cualquier transacción digital.
Firmas electrónicas simples, avanzadas con biometría o certificado digital, y cualificadas. Selecciona la que necesites y agiliza tus procesos contractuales con plenas garantías jurídicas.
El equivalente digital a la antigua carta certificada: certifica la entrega y recepción de correos electrónicos y archivos adjuntos, validando a la vez la identidad del emisor y el receptor del email.
Procesos seguros de autenticación para prevenir el fraude digital: valida la identidad digital de tus clientes o usuarios para darles de alta en cualquier servicio de forma online.
Procesos de negocio 100% digitales, legales y seguros, sin saltos entre el mundo analógico y el digital.
Tus clientes o usuarios disfrutarán de experiencias digitales fluidas, rápidas y seguras. Es el adiós definitivo al papel.
Reducir costes a expensas de la seguridad es una dicotomía analógica. El mundo digital funciona al revés: mayor seguridad a menor coste.
Para facilitar la firma digital de ofertas y contratos laborales, y para digitalizar al 100% el onboarding de nuevos empleados.
Para agilizar el proceso de contratación de pólizas de seguro, o de cualquier otro producto o servicio financiero.
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